En Ruvo di Puglia (Bari), los agentes de la Policía Estatal de Italia arrestaron a dos personas por la posesión, con el fin de traficar, de unos 900 kilos de marihuana. Si la droga se hubiera vendido, la venta habría recaudado cerca de un millón de euros. La sustancia fue hallada en un viejo granero en forma de cueva ubicado en un área de difícil acceso.
Cuando intervino la policía, encontraron a los sospechosos intentando pesar, almacenar y empaquetar cartones enteros de marihuana. En la sala los agentes también incautaron material de embalaje como maquinaria para colocar bolsas de vacío, balanzas, cajas y generadores eléctricos. Los dos estaban dentro del establo, donde también habían instalado camas improvisadas para permanecer siempre presentes para proteger la gran cantidad de drogas.