El 15 de junio, el Servicio de Impuestos Internos (Receita Federal) de Brasil encontró 268 kg de cocaína escondidos en un cargamento con cerámica para suelos en el Porto de Suape, en Recife. Según la inspección local, la droga sería exportada a África, escondida en contenedores en barcos internacionales.
Después de seleccionar los blancos para inspección, el escáner señaló irregularidades en una de las cargas y cuando fueron inspeccionados por la inspección, con el apoyo del perro rastreador, se encontró la droga. Las pruebas confirmaron la sustancia ilícita, la cual fue enviada a la Policía Federal para mayores investigaciones. La información sobre la identidad del dueño del cargamento o el origen de la droga no puede ser traspasada para no poner en peligro las investigaciones.
Las investigaciones realizadas por la dependencia apuntan a una práctica delictiva conocida como rip-on/rip-off, en la que la droga se inserta en un cargamento legal y regular sin el conocimiento de los exportadores/importadores. Así, no existe evidencia de que la empresa que fabrica cerámica y porcelanato esté relacionada con el delito en cuestión. El decomiso es resultado del trabajo integrado del organismo de inteligencia y la Inspección del Puerto de Suape.