La Aduana de Bélgica ha iniciado una campaña específica para verificar los vuelos privados y de negocios que llegan al aeropuerto de Amberes. Los agentes están poniendo un especial interés en los aviones que proceden de Brasil, pues las autoridades de distintos países tienen conocimiento de la existencia de narcovuelos en esa ruta desde Sudamérica hacia Europa cargados con cocaína.
En estas imágenes se puede ver al equipo aduanero de control de primera línea 2 de Amberes trabajando con el apoyo de Control 9 Amberes (seguridad) y el adiestrador de perros, una pieza fundamental para conocer el lugar en el que se pueden ocultar las sustancias.
La aeronave se revisa en busca de contrabando y también se controlan los documentos a bordo.
Un control similar en Brasil condujo recientemente al descubrimiento de 1,3 toneladas de cocaína a bordo de un jet privado con destino a Bruselas-Zaventem.
