El 2 de marzo, tres semanas después del brutal crimen de Barbate en el que fallecieron dos guardias civiles, Narcodiario exponía en exclusiva y a través de las imágenes grabadas desde embarcaciones de presuntos narcotraficantes aquella noche la hipótesis de que Kiko El Cabra y el resto de detenidos no habían sido los autores de la embestida que causó la muerte a los agentes en el muelle. Lo hacía exponiendo los vídeos que este miércoles volvemos a recuperar, en el que se aprecia la única narcolancha con dos antenas, la del GPS y la de un sistema wifi al alcance de muy pocos, se hallaba muy lejos del lugar del crimen y transitaba tranquila, mientras era otra de una sola antena la que hostigaba a las víctimas.
Además de la prueba de la antena adelantada por Narcodiario, la principal en este asunto, la UCO analizó huellas presentes en las embarcaciones y en las hélices, todo ello sin encontrar nada que incriminase a los seis detenidos aquella noche tras el terrible asesinato.