Efectivos de los Mossos d’Esquadra de la Generalitat de Cataluña desmantelaron en las últimas horas un campamento para la producción de marihuana que contaba de hasta once bancales para el cultivo, varias balsas de agua, un generador eléctrico y una zona de vivienda clandestina para tres personas, todas ellas detenidas por un delito contra la Salud Pública.
La zona de cultivo se hallaba en una zona boscosa de los montes de Prades, en el interior de la provincia de Tarragona. Los tres sospechosos, jóvenes de entre 25 y 28 años, ingresaron en prisión por orden judicial. En el enclave se erradicaron 10.112 plantas de marihuana en una superficie de un kilómetro.