Un conductor de furgoneta holandés ha sido condenado a 16 años de prisión, después de que la Agencia Nacional contra el Crimen (NCA) investigara una incautación de más de 200 kilos de drogas de clase A en la terminal del Túnel del Canal de la Mancha.
El 10 de junio de 2022, una camioneta Renault Master blanca registrada en Bélgica fue detenida antes de abordar un tren de Francia al Reino Unido. El conductor les dijo a los oficiales de la Fuerza Fronteriza que viajaría a Ashford, se quedaría una noche y luego regresaría. Se llamó a la NCA para investigar después de que los oficiales de búsqueda encontraron paquetes de heroína y cocaína ocultos dentro de los paneles laterales del vehículo.
En total, se recuperaron 74 kilos de heroína y 128 kilos de cocaína, que los expertos forenses de la NCA creen que habrían tenido un valor aproximado en las calles del Reino Unido de más de 12 millones de libras esterlinas. Media hora después, se detuvo una segunda camioneta, conducida por Abraham Schrier, de 61 años, de Goes en los Países Bajos. También dijo que viajaría a Ashford y se quedaría una noche.
No se recuperaron drogas de su vehículo, pero se encontraron un juego de taladro eléctrico, un enchufe y pernos que coincidían con los recuperados de los paneles de la primera camioneta, lo que indica que había estado involucrado en ocultar las drogas. Schrier inicialmente lo negó durante las entrevistas con los investigadores, pero fue acusado de importar drogas de clase A.
El miércoles 21 de diciembre, luego de un juicio de ocho días en el Tribunal de la Corona de Canterbury, un jurado lo declaró culpable y el juez lo condenó a 16 años de prisión. El conductor de la primera camioneta, Marius Verschueren, de 69 años, del área de Borgerhout en Amberes, Bélgica, fue declarado inocente.
