La Guardia Nacional Bolivariana mantiene su férrea política de control y vigilancia de las zonas fronterizas en las que, según ellos señalan, operan los Tancol, apelativo que emplean para señalar a organizaciones transnacionales que cruzan la frontera desde Colombia para traficar con drogas. En el caso de la cocaína, uno de los sistemas más utilizados son los narcovuelos que aterrizan en pistas clandestinas.