Durante un control en el puerto de Róterdam, el equipo Harc de Aduanas interceptó en la noche de este sábado un alijo de 207 kilos de cocaína. El valor de calle es del mismo en Países bajos es de más de 15 millones de euros.

La droga estaba en un contenedor cargado con piñas de República Dominicana y tenía como destino una empresa en el sur de Holanda. Los delincuentes habían creado un fondo falso en el que se escondía la cocaína. Desde entonces, los narcóticos han sido destruidos.

Las sustancias estaban ocultas mediante un sistema diferente al habitual, con paquetes más estrechos con la intención de pasar inadvertidos entre las cajas de frutas tropicales.