La aduana de Vlissingen, al Sur de Holanda, descubrió un lote de cocaína en el puerto local este jueves durante un control específico de un contenedor. Los 254 kilos representan un valor en la calle de más de 26,5 millones de euros.
Los bloques de estupefacientes estaban en cajas entre un cargamento de bananos de Ecuador y se dirigían a una empresa en Alemania. Tras el hallazgo, los funcionarios de la Aduana llamaron de inmediato a los compañeros del Equipo de Asistencia Especial (TBB) que transportaron las drogas a un lugar seguro para su análisis y pesaje.
El equipo HARC, una asociación entre la policía portuaria, la Aduana, FIOD y el Ministerio Público, está investigando más a fondo el caso. Desde entonces, los narcóticos han sido destruidos.