El Equipo Roca/Policía Judicial de la Guardia Civil de Casetas y la Guardia Civil de Alfajarín, en la provincia de Zaragoza (España) han desmantelado una plantación de más de 2.000 plantas de marihuana que se cultivaban en un paraje del término municipal de El Burgo de Ebro, y detenido a la persona encargada de su cuidado por delito contra la salud pública por cultivo o elaboración de droga, y delito contra el patrimonio natural. Se trata de un ciudadano albanés al servicio de la gran Mafia que individuos de esa procedencia han establecido en todo el país para lucrarse con los cultivos del cannabis, en especial en plantaciones exteriores como la ahora desmantelada.
Posteriormente se inspeccionaron los casi 9.500 metros cuadrados que albergaban la plantación, observando cómo la misma contaba con una completa infraestructura para su cultivo, con sistema de riego de bombeo que tomaba agua del río Ebro mediante bombas de achique con mangueras superficiales, hallándose además parcialmente oculta entre la maleza. Todo ello alimentándose de luz por un generador soterrado y perfectamente oculto con un techado rudimentario y que tenía a su vez un ventilador que hacía funciones de refrigeración. En el paraje también se localizaron bidones de fertilizantes, productos fitosanitarios y otras herramientas necesarias para el cultivo de esta sustancia.
La plantación contaba con más de 2.000 plantas de cannabis en avanzado estado de crecimiento y próximas a ser recolectadas, y se cultivaban en un terreno ubicado en una zona de interés comunitario LIC, siendo un paraje natural de gran valor ecológico que además se halla dentro de la Reserva Natural Dirigida de los Galachos de La Alfranca, que cuenta a su vez con la figura de Zona de Especial Conservación para las aves ZEPA. El cultivo era difícil de detectar al hallarse en una zona de difícil acceso, alejado a unos 500 metros de distancia de los primeros terrenos cultivables y a un kilómetro aproximadamente del único camino transitable del lugar.
Al detenido, un varón albanés de 38 años, en situación irregular en nuestro país, se le imputa presunto delito contra la salud pública por cultivo o elaboración de drogas y otro delito contra el patrimonio natural. Quedó a disposición judicial al día siguiente de su detención, decretándose su ingreso en el centro penitenciario de Zuera. La Guardia Civil continúa con la investigación para localizar al resto de responsables de la plantación.