Agentes de la Udyco Central de la Policía Nacional, en una operación conjunta con la Policía de Suecia, la OFAST francesa y la Policía de Holanda, coordinados por EUROPOL, han desarticulado una de las organizaciones de narcotraficantes más activas de Europa. La operación, liderada por la sección Greco Galicia de la Brigada Central de Estupefacientes, sirvió para la detención de cinco personas en España, entre ellas los dos principales miembros de la Mocro Mafia en el Suroeste de Europa: el sueco Jonas Falk, considerado el capo de la droga más poderoso de todo el Norte de Europa, y el marroquí Fikri Amellah, a quien se informó en prisión (donde se encuentra por otros hechos) acerca de los nuevos delitos que se le atribuyen. El operativo sirvió para enlazar, además, todas las patas de la mayor red transoceánica de tráfico de cocaína en veleros y otras embarcaciones similares.
Los investigadores centraron sus pesquisas en el citado narcotraficante colombiano, que lleva más de una década realizando importaciones de sustancia estupefaciente desde Colombia a España, quien posee una amplia red de contactos en el territorio nacional, especialmente en Galicia. El desarrollo de la investigación permitió a los investigadores conocer la estructura criminal que la organización había establecido en España, Francia y Colombia. Gracias a su experiencia en el mundo del narcotráfico, había conseguido construir un entramado delincuencial en nuestro país con el fin de introducir en Europa, a través de España, las ingentes cantidades de cocaína que sus clientes le reclamaban.
Las pesquisas realizadas indicaban que se estaba organizando un trasvase de cocaína en aguas próximas a Venezuela, para posteriormente trasladar la sustancia estupefaciente a Europa. El cargamento, de más de tres toneladas de droga, fue cargado en un velero rumbo a España, concretamente a la costa onubense, donde dos destacados narcos se encargarían de coordinar las tereas de descarga, almacenamiento y posterior transporte del estupefaciente importado desde Venezuela. El responsable de la misma sería Fikri Amellah en coordinación con otros compatriotas suyos de la violentísima Mocro Mafia, que tendrían a su servicio a personas para la custodia de la cocaína. El destinatario final, según sospechan los investigadores, sería el sueco Falk, el delincuente más conocido del país del Norte de Europa.
Una vez que la droga llegó a tierra tras el trabajo de la red con matriz en la provincia de Pontevedra desplazada al Sur de España se produjo una intervención policial en una primera fase de la operación, realizada el pasado año, en la que se intervinieron parte de los 3.228 kilogramos de cocaína trasportados hasta Andalucía. Concretamente se localizaron 1.623 kilos de cocaína ocultos en una “caleta” de un garaje situado en pleno centro de la capital onubense, tal y como informó en su momento Narcodiario. En esta primera fase se detuvo a dos de los investigados, encargados de la custodia de la sustancia estupefaciente.
En este punto de la investigación, los agentes intensificaron la actividad operativa sobre otros objetivos que estarían distribuyendo entre sus clientes el resto de la cocaína importada. Uno de estos investigados resultó ser un sujeto considerado por las autoridades suecas como el criminal más activo en los últimos años, el mencionado Jonas Falk. Se cree que la mitad de la mercancía que no pudo ser incautada en su momento llegó a manos del capo de la Mocro Mafia.
Una nueva reunión tuvo lugar en Barcelona entre varios narcotraficantes para la planificación de una operación de transporte de estupefaciente. Una reunión a la que siguieron otros contactos con sus clientes así como son los transportistas venezolanos. Una vez que se obtuvieron todos los indicios suficientes y pruebas sobre los investigados se procedió a la explotación de una segunda fase de la operación, el pasado jueves, día 30 de junio. En esta segunda fase, los agentes consiguieron detener a los presuntos responsables de organización criminal que operaba en España, uno de ellos, Jonas Falk, que fue localizado en Ibiza –donde se encontraba de vacaciones- y otro, Fikri Amellah, en la prisión en la que actualmente se encuentra cumpliendo condena por otros hechos.
Asimismo, se realizaron dos registros domiciliarios, en los que se encontraron un arma corta del calibre 7.65 con el número de serie borrado, dinero, anotaciones, terminales telefónicos y dispositivos informáticos.
La operación ha supuesto un gran esfuerzo internacional a niveles de investigación con la implicación de varios países, así como de EUROPOL, que ha venido coordinando las acciones de las diferentes agencias implicadas en los hechos. El trabajo coordinado ha servido para golpear a la cúpula de la Mocro Mafia, que, junto a la ‘Ndrangheta y el Cártel de Los Balcanes, es una de las organizaciones narcocriminales más poderosas de Europa.
3 comentarios