La Guardia Civil, con la colaboración de la OFAST (Office anti-stupéfiants) de la policía francesa y la coordinación de Europol, ha desmantelado una organización criminal que usaba helicópteros para transportar hachís y marihuana, y blanqueaba todo el capital obtenido de manera ilícita. La organización compuesta por ciudadanos franceses adquiría la droga en Marruecos y Andalucía, uno de los puntos de provisión era el Campo de Gibraltar, y posteriormente la transportaba hasta Francia mediante su ocultación entre la carga legal en camiones de gran tonelaje o mediante el método GO FAST, utilizando vehículos con placas de matrícula falsa.
A través del seguimiento de los vehículos detectados y los miembros de la organización radicados en la provincia de Málaga, la Guardia Civil localizó a uno de los investigados que utilizaba documentos de identidad falsos, llegando a detectar a dicho individuo hasta cinco identidades distintas y todas ellas falsas.
Los agentes comprobaron que varias personas realizaban actividades sospechosas y tomaban numerosas medidas de seguridad en sus desplazamientos en vehículo. Tras varios días de vigilancia, se detectó cómo interactuaban con un camión con matrícula francesa, por lo que fue interceptado en Narbona y al inspeccionar la carga se encontraron en su interior, entre la carga legal que transporta, 419 kilogramos de hachís, deteniendo al conductor del camión.
Continuando con la investigación de los miembros de la organización criminal, la Guardia Civil consiguió la aprehensión de otros 327 kilogramos de hachís en Baza (Granada) en el interior de un vehículo con placas dobladas que venía siendo perseguido. Posteriormente, los agentes detectaron otra operativa de narcotráfico y lograron la aprehensión de 860 kilogramos de hachís en Chauchina (Granada), que ocultaban entre la carga legal de un camión que había salido de otra nave industrial controlada por la organización investigada.
También se les incautaron 112 kilogramos de marihuana en Port Bou (Gerona) en otro vehículo utilizado por miembros de esta organización. Por otro lado, unos días después la Guardia Civil detectó un alijo de drogas realizado con un helicóptero en Torremolinos (Málaga), donde fueron aprehendidos 211 kilogramos de hachís y la aeronave que los transportaba y que había viajado sin plan de vuelo establecido hasta el vecino país de Marruecos.
En Marbella, los investigadores también detectaron un transporte de drogas a bordo de un turismo con placas de matrícula falsa, que tras visitar una vivienda de Marbella, partió en dirección a Málaga. Se organizó entonces un dispositivo policial con agentes uniformados para detener al vehículo sospechoso y al darle el alto, momento en el que el vehículo eludió el control policial, intentando atropellar a uno de los agentes que tiene que esquivarlo para evitar ser atropellado, pero consigue hacer uso de los medios de bloqueo pinchando una rueda del vehículo. A pesar de ello, y de que circula solo con la llanta en una de las ruedas, alcanzó una velocidad superior a 180 kilómetros por hora, llegando incluso a embestir a uno de los vehículos policiales.
Finalmente, tras una colisión lateral con el vehículo policial, se consiguió detener al conductor, hallándose en el interior del vehículo 329 kilogramos de hachís, en seis fardos y numerosos paquetes. En la casa de la que salió este vehículo, tras realizar un registro con autorización judicial, fueron incautados otros 8 fardos más de hachís que alcanzaron un peso de 266 kilogramos, procediendo a la detención de 3 personas.
Otro de los delitos esclarecidos es el blanqueo de capitales, ya que la organización investigada utilizaba el dinero proveniente del tráfico de drogas para financiar la logística necesaria, entre ella los medios de transporte incautados, y ocultaba su verdadero origen mediante el uso de empresas ficticias.
Una vez identificados el resto de los miembros de la organización se solicitan al Juzgado 7 entradas y registros en las provincias de Cádiz, Málaga, Almería y Castellón. En los registros se intervienen 3 helicópteros más, 4 armas de fuego, abundante munición, chalecos antibalas, y numerosos dispositivos electrónicos que utilizaban para evitar la acción policial. Finalmente, en la operación se han detenido a 11 personas, una de ellas por la policía francesa. Hay 9 personas pendientes de detener en Francia con órdenes europeas de detención y se ha conseguido incautar más de 2,4 toneladas de hachís y 112 kilogramos de marihuana.