Mientras las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado trabajaban para remolcar el semisumergible localizado este miércoles frente a Camariñas (que, como se sabe, acabó en el fondo) e investigan para intentar trazar la ruta de las personas que descargaron la cocaína en la cercana playa de Os Muíños, la Fundación Galega Contra o Narcotráfico pone el grito en el cielo. El alijo de droga, de miles de kilos, entró en Galicia por una zona sin apenas vigilancia. Un lugar en el que los narcos campan a sus anchas.
“Es la constatación, la enésima, de que la ruta de narcosubmarinos está consolidada. De vez en cuando vemos lo que es la punta del iceberg de una ruta muy segura para ellos. Los expertos policiales así lo aseguran. En ocasiones, como ahora, encontramos indicios, pero entre el semisumergible de Arousa y este han pasado otros cuantos y desgraciadamente, nos tememos que con éxito, tanto en este caso como en los anteriores”. Interviene Fernando Alonso, gerente de la Fundación.
“No sé qué más hace falta para que el Gobierno dote de los medios necesarios para la lucha antidroga. La lucha contra el narcotráfico tiene que ser un asunto de seguridad nacional y se le debe dedicar la máxima prioridad”, añade Alonso, que subraya que “esa es la única manera de poder plantar cara con posibilidades de éxito a estas organizaciones. Nos están inundando de cocaína por tierra, mar y aire, y la situación es francamente complicada”.
“El narcotráfico tiene que pasar a ser un asunto de seguridad nacional”
En la comparecencia del presidente de la Fundación en la comisión de Adicciones se hablaba de la necesidad de considerar la lucha contra el narcotráfico un asunto de seguridad nacional para dotar de los medios necesarios, tanto humanos como materiales, a las fuerzas de seguridad, algo que por ahora no se ha materializado. “Se tiene que legislar de forma valiente, de tal manera que podamos tener posibilidades de éxito”, dice el gerente.
“Es una lucha tremendamente desigual, ya de por sí, cuanto más con una ley restrictiva que no deja trabajar a las fuerzas de seguridad. No sé qué más es necesario para que esto tenga la máxima prioridad y para que Galicia tenga un Plan Especial de Lucha contra el Narcotráfico. Está más que acreditada la necesidad del mismo”, añade.
Fernando Alonso hizo suyas, además, unas palabras de la fiscal jefa Antidroga, Rosa Ana Morán, que hablaba en un foro reciente de las dificultades que tienen las fuerzas policiales para trabajar. “Decía que con el propósito de proteger derechos fundamentales de los traficantes se deniegan operaciones que pretende hacer la policía para detenerles”. Como ejemplo ponía el tremendo lío burocrático y judicial que necesitan justificar para poner una baliza. “Se está aplicando la misma rigidez para poner una baliza de seguimiento de una persona con la de un contenedor”. ¿Qué derechos fundamentales tiene un contenedor?, decía la fiscal. “No tiene ninguno, evidentemente. Y se está aplicando la misma protección, lo que impide en muchos casos la labor policial”, concluye el portavoz de la FGCN.
Además de los grandes alijos en planeadora o en narcosubmarino, en este impactante inicio de 2025 también se han vuelto a ver operaciones a través del puerto de Vigo. Sin embargo, el segundo puerto de la provincia, el de Marín, hace tiempo que no es noticia. Las fuerzas de seguridad piensan que el motivo puede ser la escasez de medios en el mismo. Al respecto, Alonso argumenta que “tiene que haber un escáner en todos los cuerpos. Esto es una cosa básica. Las organizaciones tienen que saber que en cualquier puerto va a haber control. No puede ser que decidan ir a Marín, por ejemplo, porque no tiene escáner, o a otro puerto que tenga menos medios. Tienen que tenerlos todos. Hay que invertir, y eso no es un gasto. Solamente en términos de la seguridad que nos supone esa inversión y el retorno económico, porque todos sabemos de los descomunales patrimonios de los traficantes. Al recuperar el patrimonio se multiplica la inversión que se haga en escáneres, en unidades policiales o en reforzar la lucha contra el blanqueo”.
“Nos están inundando de cocaína por tierra, mar y aire”
Otro aspecto que preocupa al principal colectivo social antidroga de España reside en la infiltración de las mafias de la droga en las infraestructuras portuarias. “En el tema de los puertos es clamorosamente necesaria la inversión de medios y reforzar la lucha contra la corrupción. Parece inevitable que en los puertos haya corrupción, y hay que reducirla a la menor expresión posible. Mucho nos tememos que todas estas organizaciones cuentan con un enlace en el puerto que les permite hacer lo que están haciendo, que es traficar, y ya no con cantidades menores. Hace no mucho tiempo hablábamos de hallazgos de 20 kilos, cuando aparecían 150 o 200 kilos en un contenedor ya era mucho, y ahora es una rutina encontrar toneladas de cocaína en los puertos. El problema es mucho más grave que antes, por lo que no podemos seguir con los medios de antes. Esto es evidente”.
