El Servicio de Vigilancia Aduanera de la Agencia Tributaria y la Policía Nacional, en una operación dirigida por el Juzgado de Corcubión (A Coruña), han desarticulado una organización criminal dedicada al narcotráfico con ramificaciones en diferentes puntos de la geografía de Galicia con la realización de diez registros domiciliarios y la detención de once personas. Todo ello se relaciona con el hallazgo de cinco kilos de cocaína en una caleta y afecta a una banda delictiva dedicada al tráfico de drogas y al vuelco de las sustancias. Se da la circunstancia de que parte de la droga que distribuían no entraba por las rutas clásicas del Noroeste de España, sino por otras latitudes.
El líder de la organización, asentado en la localidad coruñesa de Cee, no dudaba en atravesar España a bordo de uno de sus vehículos, o de algún turismo de alquiler, exclusivamente para mantener una entrevista de minutos con algún proveedor de estupefaciente, con el objetivo de preparar futuras operaciones de adquisición de droga. Así, durante los meses de investigación mantuvo numerosas entrevistas con personas pertenecientes a terceras organizaciones criminales preparando la introducción en España de importantes cantidades de droga vía marítima.
Entre las actividades de la red, además, se encontraban los robos de droga y también de dinero en efectivo a otras organizaciones para poder financiar futuras operaciones propias, una práctica cada vez más habitual entre narcos.
Una vez el propio líder de la organización adquiría la sustancia estupefaciente en diferentes puntos de la geografía española, la ocultaba en varios lugares marcados por la organización en la provincia de A Coruña, concretamente en la zona de Carballo. Después de la adulteración y manipulación de la droga, era distribuida en Galicia por varios subordinados del líder de la organización, quien contaba con la estrecha colaboración de su socio, con antecedentes por delitos contra las personas y era residente en Carballo. Ambos se habían conocido en prisión.
Así, en el mes de junio fue detectado por los investigadores un desplazamiento del líder de la organización a Madrid utilizando a una tercera persona para el transporte de la droga en un vehículo dotado de un sistema de ocultación tipo caleta. En este caso, el principal investigado realizaba labores de ‘lanzadera’ a bordo de su vehículo para detectar presencia policial en ruta. Para el buen fin de la investigación y la completa desarticulación de la organización, se procedió a dar el alto policial al transportista, quien fue detenido tras hallarse ocultos en su vehículo cinco kilos de cocaína.
Fruto de la coordinación policial, las unidades policiales participantes comenzaron a identificar a varios colaboradores y miembros de la organización con un reparto de papeles bien definido. Varios de los miembros de la red eran los encargados de la distribución de la droga a consumidores finales, otros se situaban como encargados de su ocultación, mientras que otros eran los responsables del transporte de esas sustancias estupefacientes.
Las medidas de seguridad de los detenidos eran máximas en la búsqueda de la presencia policial y en los traslados y entregas del estupefaciente, dificultando así la investigación y llegando a utilizar medios técnicos para detectar si estaban siendo objeto de seguimiento policial.
Una vez identificados todos los miembros de la organización, y con un amplio dispositivo en Galicia, se procedió a realizar diez diligencias de entrada y registro en Corcubión, Carballo y Muros (A Coruña, y en A Illa de Arousa, en Pontevedra.
En estas diligencias fueron intervenidas diferentes sustancias estupefacientes, dinero, útiles de manipulación y pequeñas plantaciones ‘indoor’. En total se incautaron 5,5 kilos de cocaína, tres kilos de hachís, un kilo de marihuana, 56.000 euros en efectivo, un arma de fuego, varias armas de fuego simuladas, armas prohibidas, cuatro vehículos, tres de ellos con sistema de ocultación artesanal (caletas), básculas de precisión y diversa documentación.
La operación contra el tráfico de drogas se ha llevado a cabo de forma conjunta por el Grupo de Información Regional de Estupefacientes de Unidad Operativa de Vigilancia Aduanara de Galicia, la Unidad de Drogas y Crimen Organizado de A Coruña y los Greco Galicia con base en Pontevedra.
Cuatro de los detenidos ya han ingresado en prisión. La investigación sigue abierta no descartándose más detenciones.