Un miembro de alto rango de un grupo del crimen organizado que dirigía un laboratorio de anfetaminas a escala industrial en Escocia y traficaba con heroína y cocaína, ha sido condenado tras su extradición desde España por la Agencia Nacional del Crimen (NCA, por sus siglas en inglés). Autoridades británicas y españolas llevan años trabajando juntas para capturar a prófugos de la Justicia que se ocultan en el país del Sur de Europa.
Colin Wright, de 38 años, que se había refugiado en Torre Pacheco (Murcia, España) y que anteriormente vivía en Motherwell, fue arrestado por la Policía Nacional Española en marzo de este año a petición de la NCA, y regresó al Reino Unido el 4 de octubre. Se refugió en el país ibérico tras saber que la NCA le pisaba los talones. En su domicilio español le fueron confiscados varios objetos de gran valor.
Wright había viajado al extranjero en agosto de 2020 y permaneció en España para evitar ser capturado después de que agentes de la NCA detuvieran a otros miembros de su mismo grupo criminal en marzo de 2021. Wright era el jefe de la rama escocesa y participó activamente en el suministro de cocaína y heroína tanto en Escocia como en Inglaterra.
Trabajó en estrecha colaboración con Terence Earle, de 50 años, quien fue encarcelado por 16 años y medio en abril de 2023, y con el primo de Terence, Stephen Earle, de 52 años, quien fue encarcelado por 11 años y cuatro meses en agosto de este año. Wright utilizó el nombre de usuario de EncroChat, ‘Jack-Nicklaus’, para comunicarse con Terence. También consiguió drogas, evaluó las rutas de suministro y encontró clientes.
Creó el laboratorio de anfetaminas en Motherwell. En marzo de 2020, cuando el país entró en su primer confinamiento por la covid-19, un socio criminal entregó cajas de alfa-fenilacetoacetamida (APAA), parte del proceso de producción de anfetaminas, a Wright. Durante los siguientes días, la organización comenzó a preparar el laboratorio, pero a pesar de los mensajes entre ellos diciendo que la ‘granja’ (o laboratorio) estaba listo, tuvieron dificultades para obtener los productos químicos necesarios para el proceso de producción.
Terence y Wright también intercambiaron fotografías del líquido que estaban tratando, para comprobar de qué color debería ser. Wright ayudó a enviar al menos 10 kilos de heroína y siete kilos de cocaína, la primera trasladada de Merseyside a Motherwell y la segunda en la dirección opuesta.
Se declaró culpable de cinco cargos de drogas en el Tribunal de la Corona de Liverpool este viernes (1 de noviembre) y será sentenciado en el mismo tribunal el 25 de noviembre.