En la madrugada del jueves 19 de septiembre de 2024, una operación conjunta liderada por la Policía Judiciária (PJ) portuguesa resultó en la interceptación de un velero que transportaba 100 kilos de cocaína en altamar. La operación, coordinada con el apoyo del Centro de Análisis de Operaciones Marítimas sobre Narcotráfico (MAOC-N), contó con la colaboración de múltiples autoridades internacionales de Francia (DNRED), Estados Unidos (DEA), Reino Unido (NCA), España y Portugal.
Después de que la Armada portuguesa localizase y rastrease al velero, que había cargado la mercancía en el Caribe, un equipo del Destacamento de Acciones Especiales de Infantería de Marina abordó el mismo. Los dos tripulantes de nacionalidad rusa que iban a bordo fueron detenidos y durante la aproximación inicial se detectó la presencia de estupefacientes. Al final, la PJ se incautó de 100 kilos de cocaína escondida dentro de bidones de combustible modificado.
Tras la interceptación, el equipo del DAE permaneció a bordo y escoltó el velero hasta el puerto de Setúbal y puso a los arrestados a disposición de la Autoridad Judicial.