Las organizaciones narcocriminales arriesgaron demasiado, o eso es lo que parece tras observar el ocultamiento de los 1.522 kilos de cocaína intervenidos a mediados de agosto en el puerto de Barcelona. Enviaron la droga mediante gancho ciego, con la simple colocación de la droga sobre la carga lícita del contenedor, en la confianza de que su personal a sueldo en el puerto español podría recuperarla. No fue así.
El intento de contrabando de drogas sorprendió por su cantidad, pues las organizaciones no envían más de 400 o 500 kilos (normalmente mucho menos) mediante este esquema, pues no controlan a la empresa exportadora ni a la importadora, lo que eleva el riesgo de pérdida. Es por ello que, si bien se trata del sistema más utilizado por los narcos, siempre con cargas más pequeñas. Este caso indica claramente que los narcotraficantes manejan gran cantidad de personal para ‘rescatar’ los alijos en el puerto catalán.
En las imágenes, facilitadas por el director de la Policía de Colombia, William René Salamanca, se aprecia bien el sistema utilizado. Fue Colombia quien avisó a la Guardia Civil de la partida del alijo desde Buenaventura hacia España, lo que determinó la incautación. Ese es otro aspecto relevante: sin información al respecto, habría sido difícil localizar el alijo, aun cuando fue enviado sin control de la organización.