En las zonas rurales del municipio de Siamanna, en la isla de Cerdeña (Italia), durante una inspección a una empresa agrícola, en el marco del plan más amplio de lucha contra las infracciones de la normativa comunitaria, los Carabinieri descubrieron una gran plantación de cáñamo bajo la fachada de una granja de ovejas. Por los hechos, los agentes de la Compañía de Oristano detuvieron a dos ciudadanos italianos.
El maxicultivo, que a un ojo inexperto podría haber parecido destinado a la producción de cáñamo, en realidad resultó ser un cultivo verdaderamente ilegal. De hecho, el muestreo de algunas plantas por parte de los operadores y los análisis inmediatos de laboratorio realizados en laboratorios de Cagliari revelaron el nivel del ingrediente activo THC, presente en cantidades muy superiores a las previstas por los límites legales.
La documentación y los motivos esgrimidos por ambos sospechosos sirvieron de poco para justificar la posesión de las aproximadamente 5.000 plantas presentes, que fueron inmediatamente incautadas. Los dos, detenidos y trasladados a la prisión de Oristano, tendrán que responder ahora ante la Autoridad Judicial de Oristano por producción de sustancias estupefacientes, agravada por la gran cantidad y por haber cometido el delito en complicidad.