Las búsquedas en siete estados federados de Alemania y la ejecución de siete órdenes de detención supusieron la fase final de la Operación Plexus anunciada el pasado viernes en Narcodiario y que supuso la retirada de circulación de 35,5 toneladas de cocaína por valor de unos 2.600 millones de euros.
La investigación se dirige actualmente contra ocho sospechosos principales: alemanes (43 y 54 años), azerbaiyanos (42), búlgaros (30), marroquíes (42), turcos (37 y 38) y de nacionalidad ucraniana (36).
Se acusa a los investigados de haber organizado el transporte de diez contenedores marítimos con grandes cantidades de cocaína desde América Latina a Europa a través de empresas ficticias creadas al efecto en el período de abril a septiembre de 2023 con otros cómplices aún desconocidos que se cree estarían en Turquía.
A partir de un aviso de las autoridades policiales colombianas y con la participación de Europol y otros actores internacionales, nueve de estos contenedores de envío fueron identificados y sometidos a controles aduaneros. En total se incautaron unas 35,5 toneladas de cocaína escondidas entre cajas de frutas y otros bienes legales; casi tres toneladas en Guayaquil (Ecuador), unas ocho toneladas en el puerto de Róterdam y algo menos de 25 toneladas en el puerto de Hamburgo. El valor en la calle de la cocaína destruida desde entonces asciende a unos 2.600 millones de euros. Hasta donde se sabe, se trata de la mayor cantidad total incautada hasta la fecha en una investigación alemana.
En el marco de este procedimiento, el 31 de mayo y el 5 de junio de 2024, 150 empleados de distintos departamentos de apoyo, bajo la dirección del GER Stuttgart y Karlsruhe de Baden-Wurttemberg, llevaron a cabo amplias medidas de acceso y búsqueda en distintos lugares de Renania del Norte-Westfalia.
Se ejecutaron siete órdenes de arresto obtenidas previamente, se aseguraron una pistola de fogueo y un arma de fuego Glock, así como numerosos teléfonos celulares, computadoras portátiles y otras pruebas extensas.
En el marco de las medidas de recuperación de activos, se confiscaron cinco lingotes de oro, dinero en efectivo por valor de 23.300 euros, un Porsche 911 Turbo S valorado en unos 250.000 euros y artículos de lujo. Las investigaciones, en particular la evaluación de las pruebas encontradas, están en curso. La ley prevé una pena de prisión de cinco a 15 años por cada caso de tráfico de drogas en grandes cantidades por parte de bandas.