La Policía Federal lanzó, este martes (25/6), en los estados de Mato Grosso, Amazonas, Ceará, Minas Gerais, Santa Catarina y São Paulo, la Operación Catrapo II, que tiene como objetivo profundizar la descapitalización de activos y realizar nuevas detenciones de miembros de una organización criminal responsable de la adquisición y tráfico hacia Europa de grandes cantidades de cocaína desde Bolivia y Perú, teniendo como depósito de suministros el estado de Mato Grosso. Se trata, según pudo saber Narcodiario, de la organización del encarcelado Sergio de Carvalho, alias Paul Wouter, gran capo recluido en Bélgica y reclamado en extradición por España, entre otros países, por la operación de cocaína del Titán III.
Se están cumpliendo 13 órdenes de búsqueda e incautación, 15 órdenes de embargo de bienes y valores de personas físicas y jurídicas, además de dos órdenes de detención temporal y una orden de detención preventiva, si bien esta última, al tener como protagonista al expolicía militar Carvalho, ya se está cumpliendo en Bélgica. Todas las medidas fueron dictadas por el Juzgado Penal Federal de la Sección Judicial de Mato Grosso.
Hoy concluyó la segunda fase de la investigación de lucha contra el narcotráfico internacional y el lavado de dinero, en la que se identificaron activos por valor de alrededor de 100 millones de reales (unos 17 millones de euros, al cambio) mediante aeronaves, inmuebles, joyas y vehículos de lujo, utilizados para la ocultación de activos.
Durante la primera fase de la Operación Catrapo, lanzada el 6/7/2022, 16 personas fueron procesadas por tráfico internacional de drogas y asociación con el narcotráfico. Además, se produjo el secuestro e incautación de aproximadamente 50 millones de reales y la interceptación de 2,1 toneladas de cocaína. Eran, presuntamente, las líneas de acción de la organización de Carvalho a través de Sudamérica. Había sido detenido un mes antes en Hungría.
Durante las investigaciones, la organización demostró ser altamente estructurada, con capacidad para administrar grandes sumas de dinero y absorber importantes pérdidas derivadas de las incautaciones de drogas, aeronaves y otros activos, ocurridas desde el inicio de las investigaciones policiales. Cabe señalar que la cooperación internacional resultó ser un instrumento fundamental para la eficiencia de la investigación, permitiendo realizar investigaciones en el exterior, además del cumplimiento de medidas cautelares.