Un importante cargamento de sustancias estupefacientes fue interceptado en el centro de carga de Vado Ligure (Savona, Italia), gracias a una acción conjunta del personal de la Guardia di Finanza de Savona y de la Agencia de Aduanas y Monopolios.
Fueron intervenidos 102 bloques de cocaína con un peso total de aproximadamente 116 kilos que, si se hubieran comercializado al por menor, habrían generado unos ingresos estimados en aproximadamente siete millones de euros en el país transalpino.
Las investigaciones se centraron en envíos de alimentos procedentes de países de Centro y Sudamérica considerados “de riesgo”, en los que está más extendido el fenómeno de producción de sustancias estupefacientes como la cocaína para la exportación.
El contenedor seleccionado, de hecho, embarcó inicialmente en Nicaragua, fue transbordado varias veces y permaneció por algún tiempo en puertos de México y Ecuador. La circunstancia llevó a la hipótesis, también sobre la base de experiencias operativas recientes, de que existía una alta probabilidad de que se hubiera insertado una sustancia estupefaciente escondida entre los sacos de café incluidos en el cargamento declarado.
Por ello, el contenedor, desembarcado en Génova de un barco transoceánico y posteriormente transportado a Vado Ligure en una zona del interpuerto, fue sometido a una cuidadosa inspección que permitió descubrir la carga de estupefacientes. Se están realizando investigaciones para identificar a los destinatarios del gran lote de drogas.
Los resultados de la constante actividad de lucha contra el tráfico de drogas, obtenidos por la Fiamme Gialle y por el personal de la Agencia de Aduanas y Monopolios, confirman que la dársena portuaria de Savona-Vado Ligure está considerada entre las puertas de acceso privilegiadas para la introducción de la droga en el territorio nacional.