Casi al mismo tiempo que la Policía Nacional, Vigilancia Aduanera y la Polícia Judiciária de Portugal cerraban una gran operación contra el tráfico de cocaína a gran escala entre Galicia y Portugal, la Guardia Civil hacía lo propio con otra red criminal que, aunque también distribuía cocaína a ambos lados de la ‘raia’, tenía como ocupación preferente y muy lucrativa la producción y venta de marihuana.
Así, el Equipo de Delincuencia Organizada y Antidroga (EDOA) de la Unidad Orgánica de Policía Judicial de la Comandancia de la Guardia Civil de Pontevedra, en coordinación con la División de Investigación Criminal de la PSP de Oporto (Portugal), llevó a cabo la semana pasada la fase de la explotación de la operación Quinta Feira, dirigida por el Juzgado de Instrucción 2 de Ourense.
En la misma, los guardias civiles de Pontevedra y los agentes lusos procedieron a la detención de cinco integrantes de una organización criminal, tres de ellos en España y otros dos en Portugal, presuntamente dedicada al negocio de la marihuana a gran escala, teniendo como centro operativo conocido una nave ubicada en la localidad de Amoeiro (Ourense). Al frente de la misma estaría un individuo de la provincia de Pontevedra y su principal socio, afincado en Oporto, siendo los tres restantes sus colaboradores.
La investigación se inició el pasado 9 de febrero, cuando los agentes detectaron a un individuo con antecedentes por tráfico de drogas que acudía con frecuencia a una nave de una finca localizada en Amoeiro, donde se reunía con diferentes personas de nacionalidad española y portuguesa. Esta persona sería la encargada de la plantación. La organización también contaba con un electricista que garantizaba la energía precisa de la instalación, así como con el propietario de la finca. Dos de aquellos individuos realizaban viajes constantes entre España y Portugal.
Así, y fruto de la colaboración e intercambio de información con la División de Investigación Criminal de la Policía de Seguridad Pública (PSP) de Oporto, se confirmó la existencia de un procedimiento judicial abierto relacionado con el mismo individuo por tráfico de drogas.
De ese modo, se realizaron registros por parte de la PSP en Portugal, donde se intervinieron 603.000 euros en efectivo y diferentes sustancias estupefacientes, tales como 878 gramos de cocaína, más de un kilo de marihuana, 79 gramos de hachís y 20 gramos de MDMA (droga sintética derivada de la anfetamina), además de tres vehículos, uno de ellos un Ferrari de alta gama, dos balanzas digitales y cuatro teléfonos móviles.
En consecuencia, la Guardia Civil de Pontevedra solicitó la entrada en la finca de Amoeiro, donde intervino 548 plantas de marihuana y casi trece kilos de sumidades floridas, así como dispositivos electrónicos y documentación de interés para la investigación.
A pesar de los indicios, los detenidos en España quedaron en libertad pendientes de presentarse ante la autoridad judicial cuando sean requeridos para ello, mientras que uno de los detenidos en Portugal sí ingresó en prisión.