Durante el mes de octubre, tropas de la Armada de Colombia desmantelaron 34 infraestructuras ilegales en las que, al parecer, las organizaciones narcotraficantes del departamento de Nariño, al Suroeste del país, producían sustancias ilícitas, a saber, cocaína.
Cada una de estas estructuras, que tendría la capacidad de alojar hasta 20 personas, estaba equipada con numerosos utensilios, electrodomésticos y artefactos utilizados en la cadena de producción de estupefacientes. Los laboratorios, junto al material incautado, fueron destruidos en el lugar por el personal militar, en coordinación con la Policía Judicial, cumpliendo con los protocolos establecidos.
Así mismo, en el efectivo desarrollo de registros y controles fluviales, los Marinos de Colombia capturaron en flagrancia a cuatro sujetos por el delito de porte de armas de fuego y delincuencia común, incautaron 10 armas de corto alcance, 64 municiones de diferentes calibres y tres embarcaciones con combustible de contrabando.
Las redes criminales utilizan esta zona del país por ser fronteriza con Ecuador, país a través del que sale al exterior gran parte de la cocaína que se produce en Colombia, por su rápida salida al mar y por contar con amplios territorios de selva de difícil acceso para las autoridades.