El nombre de Reinel R.P. no le sonará a nadie en Colombia. Sí se conoce más el de Dionisio de Jesús Vera Olmos. En teoría, ambas identidades se corresponden con alias Boyaco Sinaloa. La auténtica sería la primera, según fuentes confidenciales. La segunda alude al sucesor directo de El Loco Barrera, detenido y extraditado en su momento a Estados Unidos por tomar el testigo del que en su día fue el narcotraficante más poderoso del mundo.
Natural de Boyacá, de ahí su apodo, se le sitúa a caballo entre Medellín y Madrid. Las mismas fuentes confidenciales señalan a que consiguió pactar con las autoridades colombianas a mediados de la pasada década para quedar fuera de toda investigación mientras era socio directo de alias Otoniel, primero, y de alias Chiquito Malo y alias J. Firma, ahora. O lo que es lo mismo, los grandes exponentes del antiguo clan de Los Urabeños, el Clan del Golfo, que sigue siendo la organización criminal más poderosa de Colombia pese a la caída y extradición del último capo.
Quienes le investigan señalan a Boyaco Sinaloa como responsable de grandes envíos de cocaína hacia el exterior, del control de laboratorios y de numerosos asesinatos sicariales de los que sería el autor intelectual.
Algunas fuentes le situaron en su momento enfrente de alias Otoniel, llegando a asegurar que el otrora jefe del Clan del Golfo habría ordenado su muerte. Sin embargo, los datos más recientes apuntan a que ambos trabajarían juntos y que Boyaco Sinaloa, siempre desde la sombra, operaría a su lado, primero, y al de sus sucesores en la actualidad.
Entre otros asuntos, muertes aparte, el aludido estaría detrás del laboratorio de cocaína que en 2020 se vinculó con el exembajador de Uruguay en Colombia, así como de múltiples cargamentos de droga remitidos a distintos países.
En el extranjero, y de ahí viene su apodo, distintas fuentes detallan los enlaces directos de Boyaco Sinaloa con Los Chapitos, sucesores de El Chapo Guzmán, y también con el mismísimo Mayo Zambada, los grandes dominadores del negocio de la droga en México para su tránsito hacia Estados Unidos y, últimamente, también hacia Europa.