La Policía deja sin cocaína a los canales ilícitos de Cádiz tras la operación Gadir

Agentes de la Policía Nacional han conseguido lo que parece una heroicidad en los tiempos que corren: desabastecer a toda una ciudad del Sur de España, Cádiz, y a su área de influencia, de cocaína, tras desarticular una sorprendente red criminal que recurría a proveedores en Bilbao, al Norte del país, para conseguir la droga que allí llegaba desde América Latina.

El resultado final se produjo tras haberse detenido en las provincias de Cádiz y Sevilla a 16 personas miembros de la organización criminal, especializada en la distribución y venta de cocaína, especialmente, aunque también de otras sustancias estupefacientes. La investigación que se desarrolló en tres fases ha permitido la desarticulación de una red de tráfico de drogas que abastecía puntos de venta al por menor repartidos en varias localidades. En los registros practicados se han interceptado más de 68 kilos de cocaína de elevada pureza, cerca de 10 kilos de hachís y decomisados 12 vehículos, además dinero en efectivo por valor de 35.600 euros. Esta clase de grupos criminales, escalón intermedio entre los dueños de la droga y los camellos, son muy difíciles de atacar, de ahí la relevancia del operativo.

En una primera fase, llevada acabo a finales del mes de junio, se interceptó el cargamento de 66,5 kilos cocaína coincidiendo dicha interceptación con el traslado que venía realizando el principal responsable de la organización. A finales del mes de julio, una vez asegurada la incautación y recabadas suficientes pruebas incriminatorias, se desarticularon los eslabones intermedios de distribución actuando estos en las localidades de Cádiz, Jerez de la Frontera, Sanlúcar de Barrameda y Sanlúcar la Mayor (Sevilla). En esta fase, se intervino un total de 1,65 kilos de cocaína y 9,5 kilos hachís, decretando el inmediato ingreso en prisión de los investigados.

Finalmente, en la última y tercera fase llevada acabo a lo largo del mes de agosto, se procedió a la detención de las personas que integraban los eslabones intermedios de la trama, siendo estos varios individuos conocidos dedicados a la venta al por menor y con numerosos antecedentes por tráfico de drogas.

Se culmina dicha investigación con la desarticulación de un amplio entramado de adquisición y distribución de cocaína liderada por uno de los mayores traficantes de la provincia afincado en Jerez de la Frontera y que hasta la fecha, no había sido detenido, si bien personas relacionadas con los hechos han logrado esquivar el cordón policial y se hallan prófugas. Se han practicado un total de 13 registros y 16 detenciones, decretándose de inmediato el ingreso en prisión de los principales investigados y, lo que es más importante, ahora resulta mucho más difícil obtener cocaína en las calles de la capital andaluza y de otras localidades de su entorno, como Jerez de la Frontera.