Agentes de la Policía Nacional de la Jefatura Superior de Madrid, en un operativo rutinario que finalmente contó con el apoyo de unidades especializadas, detuvieron a dos individuos que transitaban en una furgoneta por la zona de San Blas-Canillejas con un importante alijo de cocaína muy bien escondido.
El vehículo fue interceptado y en una primera inspección no se halló nada, pero la llegada de los GOIT, especialistas en acceder a lugares difíciles del cuerpo, de forma coordinada con los guías caninos y sus perros adiestrados para la detección de drogas, sirvió para hallar una caleta que ocultaba unos 23 kilos de la citada sustancia estupefaciente.