Agentes de la Aduana de España intervinieron 478 kilos de cocaína en la bodega de un vuelo procedente de Santa Cruz de la Sierra, en Bolivia. El Ministerio de Gobierno del país sudamericano, Eduardo del Castillo, salió al paso de las declaraciones del expresidente Evo Morales, entre otras personas, acusando al Estado de cooperar contra el tráfico de drogas y explicó todas las medidas tomadas tras tener conocimiento del caso. Al mismo tiempo, desveló que personas presuntamente relacionadas con ese envío habían sido detenidas meses antes recibiendo gran cantidad de drogas de diseño, en concreto MDMA, que llegaron a Bolivia desde España.
“En el interior del avión no habían ni un solo boliviano, sino que la tripulación era casi en su totalidad española”. Declaró, además, de “doce cajas que no tenían guía en un pequeño contenedor”, declaró el ministro, que añadió que cinco días después, funcionarios señalan la llegada de un correo por parte de Aduanas del aeropuerto de Madrid-Barajas. “Piden imágenes de seguridad de las horas previas en el aeropuerto Viru Viru para que llegase esa mercancía. El 17 de febrero Aircop pide la misma información para monitorizar la trayectoria del contenedor”, añadió del Castillo.
A inicios de mayo, Bolivia sabe “extraoficialmente” que la sustancia se hallaba en las citadas cajas con la cocaína. El 9 de mayo se envió la información a las unidades antidroga y el 18 de mayo se solicitó a España. “Una vez publicada la información en prensa se supo que el operativo lo realizó Aduanas, del ministerio de Hacienda. Fue la empresa boliviana de aviación la que identificó a las personas que rompieron los precintos e introdujeron la droga. Junto a ellos fue detenido el conductor del camión, además de a varios miembros de una familia relacionados con la empresa de transporte que, además, controlaban en España una empresa de recepción llamada La Bolivianita”, desveló del Castillo.

En marzo, la fuerza especial incautó 67.774 pastillas de MDMA que involucraron a dos personas que pretendían ser recogidas en un vuelo procedente de España. “La droga habría venido en grandes cantidades desde España a Bolivia y casualmente estaba siendo recogida por los mismos, que apenas estuvieron diez días en la cárcel. Además de esta recepción de pastillas, estas personas tendrían otros antecedentes por tráfico de drogas”, señaló el ministro.
El ministro también pide la investigación a ciudadano colombiano nacionalizado español, tripulante de una empresa internacional de aviación que estuvo en el país entre enero y marzo y salió del mismo como turista. La carga de 478 kilos de cocaína “estaba dirigida a una menor de edad de nacionalidad española, sobrina y nieta de los representantes legales de la empresa de transporte involucrada en el envío de drogas desde Bolivia hacia España” y al revés.

Sobre el caso del envío de la droga e España a Bolivia, el ministro se extraña que no haya habido detenciones a pesar de que se haya remitido toda la información. “Queremos a todos los responsables que están enviando droga. Aquí detendremos a todos”.
Las autoridades bolivianas detuvieron también al jefe de guías caninos del aeropuerto y cambió a todos los policías que trabajaban en la citada instalación en aquel momento. En total fueron detenidas once personas en relación con los 478 kilos de cocaína.

“Hay varias personas de nacionalidad española que han llegado a Bolivia con sustancias controladas, las rutas de la droga a nivel mundial están cambiando”, concluyó el ministro.