Presentó un parte médico firmado por una clínica privada de Vilagarcía de Arousa, circunstancia que no convenció a la Sección Segunda de la Audiencia Provincial. Su presidente, Xosé Xoán Barreiro, que ya admitió el aplazamiento del juicio por las cuatro toneladas de cocaína que presuntamente entregó a dos lanchas rápidas el velero Benirrás en marzo de 2020, quiso asegurarse de que la lesión que provocó el retraso argumentada por la letrada de uno de los investigados era real. Por ello, ordenó un receso de una hora, tiempo en el que consiguió que un médico acudiese a la vivienda del acusado que sufrió un accidente de tráfico a las puertas de Pontevedra (Galicia, España) el lunes pasado. El resultado de la exploración apunta a la verificación de la existencia de un esguince cervical y la recomendación de reposo durante 72 horas.
En la sesión de ayer, el resto de defensas (hay nueve acusados en total) se adhirieron a la petición de suspensión que formuló la representante legal del acusado que sufrió el accidente de tráfico el lunes. Destacó la petición del letrado de Carlos Silla, que viaja desde el Sur de España y que pidió que «cuando se nos convoque, se celebre, pero que no se vuelva a aplazar». El juez decidió evitar señalar la vista para el viernes y eligió el próximo miércoles, día 31, como fecha definitiva para iniciar las comparecencias.