El fallecido en la descarga de Portugal fue arrollado por las hélices de la narcolancha

Se investiga al clan gallego responsable de la introducción de la cocaína / Un traficante de Ourense murió en idénticas circunstancias en 2012 durante una introducción de hachís al Sur de Lisboa
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El narcotraficante que falleció el pasado fin de semana en una playa de Peniche cayó de la embarcación y acabó siendo arrollado por la misma, sufriendo heridas mortales con las hélices de los potentísimos motores de la misma. Los efectivos policiales hallaron documentación en las inmediaciones del lugar del alijo, una zona estratégica ubicada a medio camino entre Lisboa y Nazaré, en el centro de Portugal.

Los motores de una narcolancha tipo / Guardia Civil

A falta de los resultados de la autopsia, ya se sabe que el fallecido cayó al mar en un momento crítico, cuando la embarcación se acerca a la costa bajo la influencia de las olas, y acabó siendo arrollado por la propia narcolancha que, a gran velocidad, pasó por encima de la víctima, que habría sufrido la violencia de las hélices de los motores. Se trata de un accidente que no es nuevo y que ya se ha visto en otras ocasiones, aunque es la primera vez que ocurre en una gran descarga de cocaína como la que se pudo intervenir en este caso.

Sobre el origen del fallecido, se abren dos hipótesis. La Policía Judiciária explica que podría ser un ciudadano portugués, si bien otras fuentes no oficiales mantienen la versión de que se trata de un gallego. Sea como fuere, el individuo formaba parte de la red del Noroeste de España que introdujo el alijo de cocaína en la costa. No se presentaron familiares en Portugal por el momento, lo que apuntalaría la línea de investigación de que su origen estuviese en el extranjero.

El alijo / GNR

A falta del recuento definitivo, se calcula que el alijo decomisado puede alcanzar las 1,7 toneladas, sumando la droga hallada en la embarcación y la encontrada en la zona boscosa de las inmediaciones. 

En cuanto a los otros gallegos presentes en este caso, las informaciones apuntan a que en esa zona de Portugal habría al menos tres personas relacionadas ya no solo con la introducción de la droga, sino también con la fabricación de narcolanchas. Todos ellos estarían al servicio de una oficina colombiana que se habría instalado en esa región con un único objetivo: introducir en Europa grandes alijos de cocaína.

Existe un precedente en el que otro narcotraficante gallego falleció en similares circunstancias, también en Portugal. Fue en 2012 cuando la víctima, natural de Ourense, cayó de su embarcación y fue arrollado por ella en una descarga en la que fueron intervenidas 2,8 toneladas de hachís. En aquel caso, el accidente ocurrió al Sur de Lisboa, y varios gallegos más fueron detenidos por la Polícia Judiciária. En el caso actual, esos gallegos están siendo buscados, lo mismo que los colombianos.

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