Dos aviones F-16 de la Força Aérea Portuguesa fueron activados ante la presencia en el espacio aéreo del país vecino de una aeronave de pequeño tamaño, muy similar a las que emplean los narcotraficantes en Sudamérica para el transporte de cocaína de unos países a otros, sin ningún permiso para sobrevolar Portugal.
Lo que sí se sabe es que por el momento no se produjeron detenciones, ni los tripulantes de la aeronave ni posibles personas en tierra que hayan recibido todo o parte del cargamento de drogas. Algunas fuentes apuntan que el destino final del narcojet era el Norte de Portugal, cerca de Galicia.