Las inmediaciones de Callao, en Perú, han sido históricamente lugares empleados para el almacenamiento de grandes cantidades de clorhidrato de cocaína que, procedentes de los centros de producción del interior del país, se aproximan a las terminales marítimas para su salida hacia los mercados internacionales, especialmente Europa. En las últimas horas, la Dirandro de la Policía Nacional peruana halló unas tres toneladas de cocaína, uno de los mayores alijos de los últimos meses, en uno de esos centros de acopio ubicado en una vivienda cerca de la costa del Pacífico.
Los máximos responsables de la Policía de Perú acudieron al lugar para felicitar a la Dirandro y en especial a los agentes que operan sobre el terreno para realizar esta clase de hallazgos.
La droga decomisada tendría un valor en el mercado ilícito europeo que superaría claramente los 100 millones de euros. Las autoridades explicaron que los paquetes presentaban logos distintos y que gran parte de la mercancía estaría preparada para ser adosada a mercantes mediante el sistema de torpedos.