Este lunes, 16/01, la Policía Federal, la Marinha de Brasil y la Receita Federal realizaron una acción conjunta que culminó con la incautación de cerca de 290 kg de cocaína en el Puerto de Santos en el interior de un barco de grandes dimensiones dirigido al Europa. Al mismo tiempo, la Guardia di Finanza italiana con competencias en el puerto de Savona intervino 1.000 kilos de cocaína en otro buque de celulosa que, curiosamente, había llegado al país desde el mismo puerto brasileño de Santos.
El el caso italiano, el cargamento llegó en un barco de gran tonelaje de bandera de Hong Kong cuyos tripulantes están siendo objeto de investigación, así como las personas que supuestamente recibirían el cargamento en el país transalpino.
La sospecha era que habría cocaína escondida en el arcón de la nave, un compartimiento ubicado en la parte exterior del casco que se usa para capturar agua para enfriar los motores de la embarcación.
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