La Policía Nacional ha detenido en Motril, en la costa de Granada (España), a dos varones de nacionalidad española, de 41 y 42 años, ambos sin antecedentes policiales, como presuntos responsables de un delito contra la salud pública tras haberse apropiado de un fardo abandonado en la playa de Calahonda conteniendo 30 kilos de hachís distribuido en planchas. El fardo formaba parte de un alijo de 270 kilos que apareció en el citado arenal y que fue decomisado por los agentes.
El hallazgo de la droga se produjo a plena luz del día en la citada playa. Momentos antes de la llegada de la Policía, un individuo se había bajado de un camión para apropiarse de uno de los fardos que habían aparecido abandonados, llevándoselo consigo. No se descarta que el cargamento formase parte de uno mayor localizado en fechas recientes por la Guardia Civil en las costas y en el mar de la misma provincia.
A continuación, los agentes comenzaron una batida por la zona para localizar el camión y para encontrar los fardos que hubiese por la zona. Una de las dotaciones actuantes localizó, en esa misma playa, cinco fardos de arpillera rotulados junto con dos garrafas de gasolina de 25 litros cada una.
En otra parte de la playa, los policías localizaron otros dos fardos, también rotulados, junto con una tercera garrafa de gasolina. A última hora de la tarde, otros agentes localizaron los dos últimos fardos, los cuales presentaban las mismas características que los anteriores.
Unas horas más tarde, en la carretera que se dirige a Almería, los agentes localizaron el camión cuyo conductor se habría llevado uno de los fardos que habían aparecido varados en la playa. Tras inspeccionar la parte trasera del camión, los agentes pudieron comprobar la existencia de una mancha de humedad, compatible con la que dejaría un fardo devuelto por el mar.
Tras localizar al conductor, este reconoció haber recogido de la playa el fardo con hachís y habérselo entregado, a continuación, a un amigo suyo para que lo escondiese. Finalmente, los agentes localizaron a este segundo individuo, el cual había escondido el fardo haciendo entrega del mismo a los policías.
