La colaboración de los vecinos del barrio de Montjuic-Sants, en el centro de Barcelona, resultó clave para desentrañar las actividades delictivas que venía desarrollando un individuo en su propia vivienda, dedicada en parte a la producción de marihuana.
La entrada y registro al domicilio realizada por los Mossos y la Guardia Urbana de la ciudad sirvió para dar con la infraestructura, lo que incluyó su incautación y la intervención de un centenar de plantas en distintas fases de crecimiento, más de un kilo de cogollos y 1.400 euros en efectivo producto de las ilícitas actividades que allí se desarrollaban.