Agentes de la Guardia Civil, pertenecientes a la Intervención de Armas y Explosivos de la Comandancia de Cáceres, en España, han llevado a cabo la destrucción de 1.275 armas, la mayoría escopetas, que por diferentes motivos se encontraban depositadas en las distintas intervenciones de Armas y Explosivos de la provincia.
Entre las armas reducidas a chatarra se encuentran las de propiedad particular cuyos propietarios han solicitado su destrucción, aquellas cuya destrucción ha sido decretada por la Autoridad judicial o administrativa las depositadas a disposición de particulares, una vez transcurrido el plazo máximo de depósito. También las que no fueron adjudicadas en la subasta de armas realizada el pasado febrero, y las incluidas como prohibidas por carecer de marcas, números o punzones obligatorios de un banco oficial de pruebas también han sido destruidas.