La Gendarmerie Nationale de Francia interceptó 228 kilos de hachís en un vehículo en el área de Metz. La interceptación incluyó el arresto de cinco personas relacionadas con el alijo de droga.
El operativo, desarrollado por agentes que disponen de vehículos de alta velocidad para perseguir este tipo de transportes de droga, tuvo apoyo de miembros de la Gendarmerie de Montpellier. Todas las hipótesis apuntan a que el origen de las sustancias estupefacientes está en Marruecos y que llegaron a Francia tras cruzar España por carretera.