La Aduana del aeropuerto de Viracopos (Brasil) impidió nueve envíos express con presencia de estupefacientes. Nueve fueron los paquetes interceptados en los que encontraron varios tipos de drogas como cocaína, hachís, metanfetaminas y una sustancia blanca no identificada.
Los agentes incautaron 3,5 kg de cocaína, divididos en tres cargamentos diferentes. En el primero, con destino a Australia, se ocultaron 300 gramos de la droga en un panel luminoso con el logo de una red social. Marruecos era el destino botones de ropa con 200 gramos de la droga, mientras que a Alemania se dirigían más de 3 kg del polvo diluido en botellas de champú. Otros tres cargamentos llegaron a Brasil con la presencia de 2,5 kg de hachís, 50 gramos de metanfetamina y 1,5 kg de un polvo blanco aún no identificado, pero que tuvo respuesta positiva para una sustancia a base de alcaloides tras la aplicación de narcotest.
Las importaciones de hachís incautadas tenían como destino Santo André, São Paulo y Guarulhos, todas en el estado de São Paulo. El narcótico fue encontrado en sobres y en paquetes dentro de una olla eléctrica.
En el caso de la metanfetamina, que tenía como destino la ciudad de São Paulo, la droga estaba envuelta en papel carbón dentro de un cuaderno usado. Esta práctica dificulta la identificación de la sustancia mediante rayos X. A su vez, el polvo blanco tenía como destino la capital de Minas Gerais.
