La Fuerza de Tarea Naval Tridente de El Salvador lideró la histórica interceptación de dos narcosubmarinos cargados hasta los topes de cocaína de forma simultánea en el Océano Pacífico, en dirección al Norte. La droga, que supera las cuatro toneladas, iba en dos LPV (Low Profile Vessel), embarcaciones que transitan entre dos aguas sin apenas sobresalir a la superficie, lo que complica hasta el extremo su seguimiento en altamar. La cooperación internacional fue, una vez más, esencial para la caída de estos dos semisumergibles preñados.
Los dos narcosubmarinos navegaban muy cerca. De hecho, una de las caídas se produjo a 406 millas náuticas (751 km) y la otra a 430 millas náuticas (796 km) al sur de Punta Remedios, Acajutla, en aguas internacionales próximas al citado país Centroamericano, avanzando hacia Guatemala y México.
Fue el propio presidente del país, Nayib Bukele, quien informó en su cuenta oficial de Twitter sobre el doble apresamiento. El dirigente añadió que en ambos batiscafos fueron detenidas siete personas, de las cuales cinco son de nacionalidad colombiana y los dos restantes ecuatoriana.
«Nuestra Fuerza Naval acaba de realizar la incautación de droga más grande del Plan Control Territorial, superando el récord de la de hace unas semanas)», declaró el presidente salvadoreño.
Tras el oportuno pesaje, las autoridades informaron de que la droga alcanzó un peso de 4,156 kilos de cocaína valorada aproximadamente en 103 millones 900 mil dólares o en 2,050 Bitcoin.
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