Un camionero que intentó esconder 16 kilos de cocaína en la zona de la batería de un camión ha sido encarcelado durante siete años. La Agencia Nacional contra el Crimen (NCA) investigó a Romans Gzibovskis, de 38 años, de Kastire, Letonia, después de que lo detuvieran en Dover’s Eastern Docks (Reino Unido) el 24 de agosto de este año.
Los oficiales de la Fuerza Fronteriza escanearon el vehículo, que transportaba una carga de paletas de plástico vacías, y notaron una anomalía en el compartimiento de la batería externa. Un examen más detenido mostró que la gran batería del HGV se había quitado y se había reemplazado por baterías de automóvil más pequeñas conectadas entre sí. Las drogas de clase A se habían colocado en el espacio que quedaba en el medio.
Se encontró un total de 16 kilos de cocaína, que los expertos de la Agencia Nacional del Crimen estiman que habría valido aproximadamente £ 650,000 a nivel de calle. Gzibovskis se declaró culpable de un cargo de participación en la importación de una droga controlada en el Tribunal de la Corona de Canterbury el 27 de septiembre. Fue condenado a siete años en el mismo tribunal el 9 de diciembre.
Mark Howes, comandante de la rama de la NCA, dijo: “Gzibovskis claramente pensó que este método de ocultación dejaría su carga letal sin ser detectada. Afortunadamente no fue así. No solo ha privado a los delincuentes organizados de sus ganancias, sino que ha impedido que las drogas de clase A lleguen a nuestras calles, donde alimentan la violencia y la explotación de personas vulnerables. Trabajando junto con la Fuerza Fronteriza, continuaremos la lucha contra las drogas ilegales que representan una amenaza para el público”.
Dave Smith, Director Regional de la Fuerza Fronteriza del Sudeste y Europa, dijo: “La sentencia de Romans Gzibovskis esta semana es el resultado de la diligencia y dedicación de la Fuerza Fronteriza y la Agencia Nacional contra el Crimen para asegurar las fronteras del Reino Unido y enjuiciar a aquellos que buscan contrabandear drogas ilegales al país. “Todos los involucrados pueden estar orgullosos de su trabajo y, en particular, de los oficiales que descubrieron e impidieron que esta peligrosa droga ingresara a nuestras comunidades”.
