El fiscal antidroga de Paraguay imputó al prófugo Narciso Ayala y a otras seis personas por tráfico ilícito de drogas y lavado de Dinero. Pidió, además, medidas cautelares sobre su ostentoso patrimonio en el país sudamericano. Todo ello en el marco de la operación Jerjes, un nuevo golpe al narco en un estado cada vez más beligerante contra las mafias que atentan contra la Salud Pública.
Narciso Ayala habría creado una organización criminal que se dedicaría al tráfico de cocaína desde Perú o Bolivia, hasta el territorio paraguayo, y de este lugar hasta Brasil y países europeos”
El Ministerio Público paraguayo considera a Narciso Ayala líder de la organización y financista. Sería propietario de 10 vehículos y de más de 15 inmuebles, además de simular inversiones en el área de ganadería e inmobiliarias, y contaba con artículos de alta gama. Ayala, hoy día prófugo de la justicia, sería socio de una sociedad denominada “4 hermanos de Canindeyú”, en conjunto con su pareja – también imputada – Ninfa Villasboa Chamorro, quien además sería titular de inmuebles y vehículos.
Francisco Delosanto Ayala, que fue detenido, y Pablo Alberto Martínez Groessinger, serían las personas de confianza de Ayala y encargados de la logística del tráfico y comercialización de la sustancia ilícita. Didier Ramón Ledesma, es considerado el testaferro de Narciso Ayala por los investigadores. Carmen Jazmín López Florentín es la supuesta encargada de custodiar los establecimientos que se utilizaban para la labor de acopio, transporte y comercialización de la droga. Sirio Eudes Riquelme Bazán (detenido), sería parte importante en la compra de divisas para las operaciones ilícitas.
Tras una investigación policial y fiscal por hechos punibles de tráfico de drogas y armas que comenzó en el año 2019 en Brasil respecto a las actividades transfronterizas de Narciso Ayala, las autoridades paraguayas dieron inicio al operativo Jerjes. El encausado Narciso Ayala habría creado una organización criminal que se dedicaría al tráfico de cocaína desde Perú o Bolivia, hasta el territorio paraguayo, específicamente en el departamento de Canindeyú, y de este lugar hasta Brasil y países europeos, así como envío de marihuana a Chile.
A partir de los indicios, la investigación arrojó que Narciso Ayala habría utilizado dentro del sistema económico nacional los beneficios que le otorgaba la labor ilícita de la venta de drogas y en efecto a sus parientes, quienes actuaban de testaferros y accionistas de empresas fachada, así como titulares de inmuebles y automotores.
La Unidad Especializada en la lucha contra el Narcotráfico desplegó a todos sus agentes fiscales dentro del marco de esta causa penal. En ese sentido, se realizaron allanamientos en fecha 27 de octubre en el departamento de Canindeyú. En total, fueron 17 los inmuebles allanados que serían producto o parte del proceso de los ilícitos ejecutados mediante los emprendimientos de activos al sistema económico nacional. Es decir, sería capital que provendría del tráfico de drogas.