El Ministerio de Seguridad Pública de Costa Rica coordinó la interceptación de una embarcación de perfil bajo, tipo semisumergible, que navegaba de Sur a Norte por aguas del Pacífico con un cargamento de unos 1.900 kilos de cocaína de extrema pureza.
Fueron los efectivos del servicio de Guardacostas del país sudamericano los que llevaron a cabo el operativo de captura del narcosubmarino, un artefacto muy similar a los que se emplean de forma casi rutinaria en esa zona del planeta para el tráfico de estupefacientes, atravesando el continente por el Oeste hasta llegar a costas de México o incluso cerca de Estados Unidos.

En el semisumergible, que apenas se eleva un metro sobre el nivel de las aguas, lo que hace muy difícil su rastreo, fueron detenidos tres individuos, los tripulantes del mismo. La cooperación internacional fue, una vez más, la clave para el éxito de la operación del Ministerio de Seguridad Pública costarricense.